• Resalta, que a pesar de todo, hubo avances en mejora de infraestructura y salud
El alcalde de Doctor Coss, Bernardo Solís, presentó su primer informe de actividades donde destacó el gran cambio en la forma de gobernar con acciones y estrategia precisas, honestas y trasparentes.
En el recuento de obras y trabajos de sus primeros doce meses de gestión, recordó el amargo pasado que vivió la población con una administración que dejó en muy malas condiciones la región, que también sufrió los estragos del Covid y la falta de agua.
“Los primeros doce meses de gestión, alcanzaron logros, a pesar de los embates de tres de las peores crisis de la historia de Doctor Coss: la del COVID-19, la del agua y la de los graves problemas que dejaron una serie de irregularidades detectadas de la pasada administración. En muchos casos hubo mala intención, corrupción y hasta opacidad, aprovechando que los ciudadanos apenas salían de su encierro obligado por la contingencia sanitaria”, aseguró el edil en el informe a la comunidad.
Agregó que era necesario vencer el reto para brindar todas las oportunidades a la ciudadanía para iniciar con la reactivación ganadera, la social, gubernamental y la económica de la región para vencer los atrasos registrados.
Entre las irregularidades detectadas destacan una red de casi un kilómetro de electrificación y agua potable, hacia el rancho de un ex funcionario público, y el mal estado en las que dejaron las unidades de transporte del municipio. extrañamente dañados antes de asumir el poder.
Entre los avances presentados se reportan mejoras en la infraestructura urbana como plazas y lugares públicos que fueron usados por las familias de Doctor Coss tras dos años de encierro. La rehabilitación de los caminos rurales que pudo hacerse luego de gestionarse diversos fondos y a pesar de cargar con una deuda dejada por la anterior administración.
Los apoyos a sector agropecuario tampoco quedaron fuera de las prioridades pues una pipa que había sido secuestrada por exfuncionarios fue rescatada y sirvió para llevar agua a los campesinos afectados por la crisis hídrica.
La atención social, comandada por su esposa y presidenta del DIF, Sanjunaita Guerra de Solís, dignificó el trato hacia la población. Implementando nuevas estrategias en salud, al instalar el servicio médico permanente para los residentes que cuando requerían cuidados, tenían que viajar a otros municipios o esperar un largo tiempo para la atención.